El club de lectura Ladrones de libros se reúne vía Instagram Directo

 

El pasado miércoles, día 18 de noviembre, se reunió el club de lectura Ladrones de libros, vía Instagram, para comentar el libro Huye rápido, vete lejos, de Fred Vargas, una de las más reconocidas escritoras francesas de género negro que además es medievalista, algo que se aprecia notablemente en esta novela.

La acción transcurre en el París de la época actual, en esta ciudad desembarca el viejo Joss, marinero retirado, para recuperar el oficio de pregonero, que ejerció su abuelo, aunque ya está completamente en desuso. Joss logra subsistir leyendo los mensajes que cada día le dejan los vecinos en una urna. El problema comienza cuando, entre esos mensajes aparecen algunos de tono apocalíptico. Por otro lado, en algunos edificios de la ciudad de París comienzan a verse unas extrañas inscripciones sobre los marcos de algunas puertas: un cuatro invertido y las letras CLT.  A partir de aquí el comisario de la brigada de homicidios, Adamberg, deberá enfrentarse a una seria de crímenes que van a sembrar el pánico en la ciudad porque el asesino está asumiendo el rol de sembrador de plagas como un elegido de Dios. Para ir encajando las sucesivas piezas que se van desgranando y ayudar al comisario en su cometido, éste contará con la ayuda de varios personajes peculiares, con un amplio conocimiento sobre la historia de la peste en Europa.

La novela sido muy valorada por el grupo, todas coincidimos en afirmar que se trata de un excelente ejemplo de novela policial que cumple con todos los requisitos del género, pero que muestra un estilo muy personal. Con un elevado nivel de conciencia crítica la autora nos ofrece una radiografía de la sociedad contemporánea en un relato de gran trasfondo existencial, donde lo que menos nos ha seducido ha sido el esclarecimiento de los hechos criminales o el desarrollo de la investigación.

A este respecto, algunas participantes señalaban que se trata de una novela de personajes, todos ellos muy bien definidos, en la que sin duda destaca Adamberg, personaje contradictorio y en ocasiones desesperante. Un peculiar policía que investiga sus casos sin orden ni concierto, carente de todo método, y que, sin embargo, nos muestra que la intuición, la inspiración o el pálpito son igualmente válidos para alcanzar la realidad. Otros personajes que se han ganado nuestra simpatía son el marinero en tierra, Joss Le Guern, el falso aristócrata Decambrais, o los cuatro evangelistas.

Gran parte del debate giró en torno a la ambientación de la novela. La historia consigue mantener el interés del lector hasta el final y a pesar de las referencias históricas constantes, el ritmo no decae.

Otro punto importante que acaparó el interés del grupo fue la manera en la que la autora encaja la figura del pregonero, la superstición o la enfermedad de la peste. Para algunas estos dos aspectos elevan la calidad del texto porque son elementos intemporales, para otras sin embargo resultaron un recurso forzado, poco coherente y verosímil.

En lo que todas estuvimos de acuerdo es en que se trata de una obra con una prosa muy rica, con muchos matices, giros inesperados de la historia y con unos personajes, aunque arquetípicos, dotados de una honda proyección psicológica.

Para finalizar se leyeron algunos fragmentos del texto que eran especialmente relevantes y se presentó el libro que leeremos el próximo mes. El Dolor de los demás de Miguel Angel Hernández.

Muchas gracias a todas por participar.