Los ladrones de libros en "El callejón de los milagros"

El pasado lunes día 9 de abril, el club de lectura "Ladrones de libros" hacía su puesta en común del libro "El callejón de los milagros". Su autor Naguib Mahfuz describe el ambiente de un callejón de El Cairo en un barrio que es un zoco en el centro histórico de esas ciudad de la que no da ningún dato más, por lo que, sin estos nombres, podríamos pensar que la acción podría haber transcurrido en cualquier ciudad del ámbito islámico.

Aquí, una imagen de ese zoco:

http://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Khan_el_khalili.jpg

En este callejón describe la personalidad y la vida de unos personajes bien definidos, físisca y psicológicamente, que pronto logran captar la simpatía o el rechazo de los lectores. En una reseña de la wikipedia se describe con bastante precisión todo el argumento del libro, y así, podemos leer:

Mahfuz retrata en El callejón de los milagros una sociedad cerrada, frustrada y llena de deseos imposibles a través de una galería de personajes inolvidables. Los personajes maduros prefieren permanecer aislados en su mísero barrio, manteniendo una apariencia de normalidad y una falsa atmósfera del pasado, en lugar de adaptarse a los tiempos cambiantes. Por su parte, los jóvenes sueñan con aventuras, riquezas y placeres y sobre todo con salir del barrio. El callejón de los milagros es una representación atemporal del conflicto entre la tradición y la modernidad, entre el pasado y el presente. Los problemas sociales, como los coletazos finales de la Segunda Guerra Mundial, la presencia británica en Egipto y el inestable sistema económico permanecen en segundo plano, como un decorado, mientras que los residentes en el callejón no pueden ver más allá de sus propios problemas. Mahfuz ofrece una visión cruda, sin concesiones al lector: los maridos odian a sus esposas y viceversa, los padres echan a sus hijos, los enamorados se traicionan, los mendigos se deforman para conseguir más ganancias, los dentistas colocan a sus pacientes dientes de oro robados a cadáveres...Mahfuz no ofrece consuelo al lector. Dondequiera que el lector va, puede oler el aroma de un nuevo acto corrupto.

A pesar de que la asistencia no fue nunmerosa, con este telón de fondo se abría un ámplio debate en el que se trataron temas como el maltrato, la homosexualidad, el papel de la mujer en el mundo islámico, el ambiente de miseria de algunas situaciones y personajes, perfectamente trasladables a otras zonasmarginales de muchas ciudades, la influencia de la religión en el ámbito de la vida de los personajes del libro en particular y de algunas sociedades en general...

Todos los asistentes estuvieron de acuerdo en que el libro les había gustado, pero, sobre todo, en algo que queda de manifiesto cada vez que nos reunimos: en el valor y la importancia de la lectura en nuestras vidas individuales, como una emoción que vivimos de una manera íntima, pero, al mismo tiempo, tan enriquecedora cuando se comparte con la visión de otros lectores y que tanto sentido da a estas reuniones en las que, no solo compartimos una lectura, sino que, al mismo tiempo, fluyen pensamientos, experiencias de esos "enamorados de los libros"

Isabel Pazos y Concha Velasco. Integrantes del club " Ladrones de Libros"